El aumento de los precios de la energía está teniendo un gran impacto en el suministro de papel y cartón para la industria del embalaje. En Finlandia, se han cerrado algunas fábricas de papel y varias fábricas francesas han dejado de producir desde la semana pasada. "Actualmente, la situación es dramática", dice Johan de Neef, director de la empresa belga Smart Packaging Solutions. "Suministramos cartón sólido a varios productores de frutas y hortalizas, algunos de los cuales actualmente han decidido no sembrar por los altos precios del gas, tratándose de un sector que opera con unos márgenes de beneficios muy ajustados. El sector de la producción invernada se encuentra en una situación enormemente difícil".

"Afortunadamente, como empresa bien estructurada, hasta ahora no hemos tenido que declinar pedidos. Tenemos suficientes materias primas a nuestra disposición. No obstante, nuestras ventas han bajado debido a la menor demanda", dice Johan. "La gran pregunta es hasta qué nivel subirán los precios del papel. Nuestros listados de precios son válidos por un mes nada más, ya que no podemos firmar contratos con varios meses vista. Creo que los precios seguirán subiendo, aunque no sé hasta qué punto".