Los problemas en la cadena logística mundial, que llevaron a disrupciones en los embarques y fuertes alzas de costos, siguen siendo un dolor de cabeza para el sector exportador de fruta. Este magro es­cenario llevó a Exportadora Santa Cruz, una de las principales empresas de envíos de fruta del país, a solicitar su reorganiza­ción, afectada, entre otras razones, por el ambiente de sobrecostos derivado de la logística.

La frutícola formada hace 35 años in­gresó el requerimiento el pasado vier­nes ante el Primer Juzgado Civil de San­tiago, con miras a reestructurar sus ni­veles de endeudamiento y continuar siendo una "empresa líder en el merca­do de la exportación de fruta, a la vez que cumplir con sus obligaciones frente a acreedores, clientes y productores".

En la temporada 2021-2022 registra­ron un total exportado de 30.450 tone­ladas. "El volumen de exportación de fruta de los últimos años ha sido de 50 millones de kilos, comercializada en más de 29 países de Europa, Estados Unidos, Asia y Latinoamérica", detalló la compañía.

La empresa, el quinto mayor exporta­dor de paltas, kiwis y naranjas en el mer­cado, indicó que se vieron afectados por "situaciones externas y extraordinarias que no les han permitido cumplir con sus compromisos con una serie de acreedores y proveedores".

Detallaron el impacto producto de in­versiones en sus plantas; un incendio a fines de 2021 en su unidad de Quillota, "lo que disminuyó en un 40% la capaci­dad de procesamiento de fruta"; y por los "problemas y sobrecostos derivados de la logística de exportación y, en parti­cular, el aumento de tarifas navieras y de costos de los materiales necesarios para exportar".

Según reportó la compañía frutícola, ligada a Guillermo Correa Ruiz-Tagle y Jorge Covarrubias Morandé, el total de pasivos -de acuerdo con el estado de deudas de la empresa al 31 de octubre de este año-, asciende a $53.015. 904.409. Sus principales acreedores son Scotia­bank ($11.780 millones), el factoring Pen­ta Financiero ($6.237 millones) y Bci ($5.454 millones), que representan el 22,22%, 11,77% y el 10,29% del total, res­pectivamente. Informó que posee acti­vos por US$ 66,8 millones.

A través de este proceso, Exportadora Santa Cruz aseguró que buscan la "dis­minución de endeudamiento y reestruc­turación de costos y gastos de adminis­tración y ventas", así como también "la búsqueda de nuevas alternativas navie­ras, privilegiando aquellas con mayor seguridad en cumplimiento de tiempos de tránsito, junto con las que permitan reducir costos". A nivel operacional, es­timan reducir los volúmenes de expor­tación de fruta "en aquellas especies más afectadas por las bajas de consu­mo".

En tanto, la compañía afirmó que ya se iniciaron "conversaciones para orde­nar el pago de ciertas acreencias de parte de productores de fruta y proveedores clave, y de esa forma, las mismas refle­jen la realidad y características actuales del mercado". Respecto a los acreedo­res, indicó que ya realizaron acerca­mientos con "los principales acreedores financieros a través de una agenda de reuniones y entrega de información", a la vez que llevaron a cabo "la contrata­ción de asesores legales y financieros que asistieran en la evaluación de la si­tuación comercial y legal de la exporta­dora, y los caminos a seguir".